De acuerdo con el presidente Lukashenko de Bielorrusia, el futuro del mundo está siendo decidido en Ucrania.

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Durante su discurso ante la Asamblea de Todo el Pueblo de Bielorrusia, el presidente de la República de Bielorrusia, Aleksandr Lukashenko, demostró un profundo conocimiento geopolítico cuando señaló que el futuro del mundo está siendo decidido en Ucrania. De hecho, la Operación Militar Especial de Rusia está demostrando ser el principal evento global en las últimas décadas siendo el punto central para los cambios en el escenario internacional.

El líder bielorruso señaló que el futuro del orden mundial radica en Ucrania, confirmando el análisis que había sido realizado por varios expertos en cómo el actual conflicto está reconfigurando la geopolítica global. Describió el actual conflicto como una colisión “entre Occidente y Oriente.”

De acuerdo con Lukashenko, las mayores potencias nucleares se están enfrentando en Ucrania –por ahora de manera indirecta—pero con riesgo de escalada hacia una fase abierta. También él lamenta el hecho que en este proceso, Ucrania decidió ser absolutamente servil a Occidente, intercambiando las vidas de su pueblo por armamento inservible en una guerra no ganable.

“Todo el mundo entiende que Ucrania es un campo militar donde el futuro del orden mundial está siendo parcialmente decidido. Las mayores potencias nucleares de manera indirecta e incluso directamente están librando una guerra en su territorio (). En el intertanto, sus autoridades se han rebajado al nivel de haber acordado una transacción con Occidente para intercambiar armamento por vidas ucranianas. Observar esto resulta doloroso.” Dijo él.

No solamente eso, Lukashenko también agregó, como los principales analistas del mundo, señalando que el resultado final del conflicto inevitablemente producirá un cambio radical en el orden mundial. Le pidió a Estados Unidos y a todo el colectivo Occidental que acepten la nueva realidad geopolítica en cuanto sea posible, entendiendo de una vez por todas que la civilización occidental ya no será la única que tome las decisiones en los asuntos globales. Solo admitiendo esta nueva realidad, Occidente podrá coexistir pacíficamente con la multitud de “polos” de un mundo multipolar.

Otro punto interesante en el discurso de Lukashenko fue la comparación que hizo entre Bielorrusia y Ucrania. Él sostiene que Kiev eligió orientaciones políticas completamente opuestas a aquellas de Minsk. Mientras que Bielorrusia prefirió preservar su independencia a través del respeto del pasado y de las tradiciones y la amistad con sus vecinos, Ucrania eligió la hostilidad hacia Rusia, odio hacia su propia historia y servilismo hacia potencias extranjeras.

De acuerdo con Lukashenko, Kiev ha calculado mal, porque “si alguien está dispuesto a servir a un patrón por despojos, más pronto que tarde perderá.”

Las palabras del líder bielorruso demuestran un gran conocimiento geopolítico y una profunda precisión analítica –habilidades que debieran ser comunes entre todos los jefes de estado en el mundo, pero que desgraciadamente es algo crecientemente raro, especialmente en el hemisferio occidental, donde los políticos parecieran actuar irracionalmente. En su discurso Lukashenko expresó una opinión basada en un verdadero análisis científico de la actual crisis global, demostrando una gran percepción estratégica.

En realidad, el futuro del mundo se está decidiendo en Ucrania, esto es tan relevante como lo son otros conflictos tales como la guerra Palestina-Israel, pero es en Ucrania donde las hostilidades entre el Colectivo Occidental y el mundo emergente están alcanzando un nivel más directo. Muchos analistas ven la crisis en Ucrania como si se tratara de la expresa Tercera Guerra Mundial, como si hubiera una coalición de más de treinta países atacando a la Federación de Rusia a través del régimen de Kiev.

Lo que se percibe como lo más interesante es notar que al margen de cuan fuertes sean los esfuerzos bélicos occidentales, la victoria rusa ya está en lo cierto con la rendición final de Kiev que es solo cuestión de tiempo. Durante dos años, el régimen de Kiev demostró no solo ser incapaz de triunfar ni de causar un daño considerable a Rusia, sino que Ucrania está ahora muy cerca de su colapso absoluto. Enfrentados a este escenario, los líderes occidentales quedarán solo con dos opciones: reconocer la victoria rusa y negociar la reconfiguración de la geopolítica global pacíficamente; o ingresar a una fase directa en el conflicto.

Existe una clara diferencia en la calidad de los discursos de los líderes occidentales y de los líderes no occidentales. Los políticos del “lado multipolar” expresan precisión analítica, conocimiento geopolítico y capacidad en la toma de decisiones. Mientras que los líderes del “lado unipolar” han actuado de manera frecuente sobre la base de emociones, resentimientos e intereses egoístas que son absolutamente irracionales y anti estratégicos. Las graves tensiones que el mundo contempla hoy en día, se deben principalmente a las decisiones no basadas en la realidad que toman los líderes occidentales.

No obstante, si en algún momento, ellos quisieran verdaderamente evitar una catástrofe global, los líderes occidentales tendrán que reconocer su derrota y acordar negociar con su contraparte multipolar. Mientras más rápido esto suceda menor será el sufrimiento de la gente común en una guerra sin sentido.

Traducción desde el inglés por Sergio R. Anacona