Occidente está perdiendo y la esperanza que tiene Blinken en que el establecimiento mantenga una fallida campaña militar, está mal orientada y tonta.

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Con la recientemente no anunciada visita de Anthony Blinken a Kiev, naturalmente hubo una gran volumen de especulación en cuanto al pensamiento en Washington durante un año electoral no solo para Estados Unidos sino también para la Unión Europea – y no nos olvidemos del Reino Unido cuyo líder recientemente anunció que una elección relámpago los cogió a todos por sorpresa.

Las oligarquías occidentales se están poniendo nerviosas. Y ellas tienen últimamente mucho en el plato que explicar por sus estados nerviosos. La reciente reunión entre líderes rusos y chinos reafirmó el mensaje para ellas: “El Mundo Multipolar se está acercando muy rápido”. En Ucrania existe muy poca razón para ocultarlo. Occidente está perdiendo y la esperanza que tiene Blinken para seguir manteniendo ahí una fallida campaña militar mal orientada y tonta. La desesperación ya no es opaca ni oculta en una nube de humo y espejos de noticias falsas de parte de los periodistas occidentales quienes solo tienen solo las declaraciones de la OTAN como referencia. Ahora eso es palpable.

A penas pasa una semana sin que una nueva medida tomada ya sea por la OTAN o el presidente Zelenski que no haya causado un devastador impacto sobre la moral.

Recientemente, Zelenski ratificó como ley un proyecto que permitirá que algunos presos comunes ucranianos sirvan en las fuerzas armadas ucranianas a cambio de la posibilidad de salir libres al final de su servicio militar. Medida descrita incluso por el New York Times como “Desesperados intentos de parte de ‘Kyiv’ para reponer sus fuerzas luego de más de dos años de guerra.”

Por supuesto que para aquellos criminales se beneficien de su contribución, ellos también tienen que vivirlo, se trata de un escenario improbable para la mayoría de ellos en la línea del frente rodeados de viejos o de 25 años de edad haciendo el número para lo que ha sido denominado máquina “moledora de carne.”

De hecho Zelenski podría estar cerca de aplicarla, como se le ha señalado que esta medida se asemeja a la aplicada ampliamente por Rusia para aumentar sus fuerzas y que Ucrania ridiculizó al comienzo de la guerra.

A pesar de ser ridiculizada, últimamente ya no es un problema a estas alturas del juego.

Por su parte Blinken debería estar bien acostumbrado a verse como un estúpido boquiabierto en el escenario mundial a pesar de que hasta su endurecida base de apoyo ha notado que cada vez que se mete en un avión y se dirige hacia un punto caliente, todo lo que se produce no es más que una eyaculación de banales sonidos de mordiscos. Y eso sería todo.

Pareciera que él cree que el número de veces que él vuela hacia una localidad, lo convierte en un experto en el lugar o le brinda a sus argumentos más gravitas como él mismo se lo señaló recientemente a Ted Cruz en el Congreso, donde el senador republicano lo interrogó sobre el genocidio que Estados Unidos está ayudando a Israel para llevarlo a cabo.

Resultó abrumador cuán ignorante resultó ser Biden en cierto número de temas, lo que justamente demuestra que sin preparación y cuán descalificados son muchos políticos occidentales en torno a sus propios temas. Sin anotaciones y sin preguntas preparadas por sus propios amigos periodistas, el intercambio entre Blinken y Cruz fue tan cruel que la mayoría de nosotros miramos para otro lado después que un golpe tras otro fue asestado sobre el aporreado cuerpo de Blinken. Fue literalmente como ver a alguien disparando con una Magnum contra pescados muertos dentro de un barril. Blinken que es el gurú de la política exterior de Estados Unidos, ni siquiera sabía cuántos barriles de petróleo produce diariamente Irán. Asombroso.

Si este es el tipo que maneja la política exterior de Estados Unidos asesorando al Viejo Joe acerca del mundo, luego entonces no sorprende a nadie que Biden se esté dirigiendo hacia las urnas con dos guerras mundiales instigadas por él – y que actualmente las está financiando – mientras que Rusia, China e Irán se hacen cada día más fuertes. Todo lo que debería ser enfatizado en ambas e imprudentes políticas de Biden y quizás lo más importante, su debilidad.

Pero no se trata solo de errores garrafales y el belicoso circo de Washington que entra a caballo en el pueblo y mata a tiros a toda la gente equivocada antes de radicarse. Esto es Estados Unidos cuyos peores y fallidos cálculos en Ucrania van a dividir aún más a una agotada OTAN en tanto las elites occidentales son forzadas a arrebatar el alimento desde la boca de sus propios pobres para gastar más en cañones y municiones.

Se trata también de un gobierno que está detrás del genocidio de Gaza, que amenaza con extenderse y regarse por toda la región, que no dejará a Estados Unidos como victorioso ni ahí ni en su propio país. La fiesta de cumpleaños de la OTAN planificada hace poco, le brindará a los satíricos bastante trabajo en cuanto a cómo los líderes occidentales ensucian sus interiores observando cómo Rusia desplaza su armamento nuclear cerca de la frontera con Ucrania y a los europeos dirigirse hacia las urnas para elegir eurodiputados en la Unión Europea, proyecto que es un pollo sin cabeza en su mejor día y en contraste hacen que Blinken se vea bastante creíble.

Traducción desde el inglés por Sergio R. Anacona