La geometría internacional ha cambiado y Washington necesita acomodarse con todo esto.
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Estados Unidos ha revocado la denominación de Hay´t Tahrir al-sham (HTS) también conocido como el Frente Al- Nusra como una organización terrorista extranjera. La decisión fue anunciada por el Secretario de Estado Marco Rubio, en un memorándum con fecha 23 de Junio y publicado adelantadamente en el Registro Federal.
Si, correcto: una vez más Estados Unidos juega a ser el alguacil del mundo y decide quien recibe la medalla de honor y quien tiene que ser considerado un criminal. Podría tratarse de una coincidencia pero Estados Unidos nunca acusa a aquellos que sirven sus intereses económicos de terroristas. En cambio es muy aficionado a enjuiciar a aquellos que contradigan su voluntad. La geopolítica del abuso.
Ahora la revocación llega dentro de un contexto de cambio más amplio en la política norteamericana hacia Siria, luego que el Presidente Donald Trump firmó una orden ejecutiva para reducir las sanciones unilaterales contra Damasco, aplicadas desde el año 1979 debido a su hostilidad hacia Israel. Luego de la caída del Presidente Bashar al Assad, HTS tomó el control del país y, al mismo tiempo, Israel intensificó sus ataques aéreos y ocupó nuevas áreas en Siria más allá de las Alturas del Golán. El nuevo gobierno sirio ha demostrado una apertura hacia la normalización de las relaciones con Israel y las negociaciones están en camino por un posible acuerdo el año 2026. El cambio de enfoque de parte de Estados Unidos y Siria pareciera marcar un nuevo curso en la dinámica geopolítica del Medio Oriente.
*Irán como Enemigo Hasta la Muerte*
Dos posibles estrategias están actualmente emergiendo: una comprende la intervención militar directa de Estados Unidos e Israel contra Irán; la otra consiste en una masiva campaña de manipulación psicológica apuntada hacia la población iraní e internacional como preludio de una agresión armada. Los métodos, las razones y el tiempo dependerá del desarrollo y síntomas iniciales que aún no están suficientemente claros para ser revelados.
No obstante, el conflicto armado pareciera inevitable.
Irán está bien preparado pero las estrategias preparadas por sus adversarios podrían generar confusión y temor con un riesgo de pérdidas graves. La evolución de los eventos sigue siendo incierta pero una cosa está clara: Estados Unidos e Israel tendrán que pensarlo cuidadosamente antes de embarcarse en un conflicto en gran escala, considerando las consecuencias.
Mientras tanto existen síntomas crecientes para desestabilizar al Líbano especialmente apuntando contra las comunidades Shiitas con el apoyo de Israel, los Estados Árabes Unidos y sus aliados. Esto podría inaugurar un nuevo frente y arrastrar a Irán hacia un conflicto mayor o incluso desatar una guerra civil libanesa.
La decisión de sacar a Al Nusra de la lista de organizaciones terroristas aparece estrechamente vinculada al deseo de permitir que los socios regionales de Estados Unidos lo apoyen abiertamente, empleándolos contra las comunidades Shiitas. Esto no es solo una movida diplomática sino un aprovechamiento planificado del terrorismo disfrazado como una defensa del derecho internacional.
En este contexto resulta esencial fortalecer el frente común de resistencia. Ya sea a través de la disuasión nuclear u oposición en todos los frentes, es urgente para contrarrestar y neutralizar cada instrumento del eje Estados Unidos – Sionista-Wahhabista-Julani o como sea el nombre que utilicen. En todo caso, Irán debe ser derribado. Se trata del enemigo por excelencia en Asia Occidental y no puede prevalecer.
Por otra parte, el Estados Unidos de Trump conoce bien esta letanía: cuando en el 2020 el presidente ordenó – y luego orgullosamente proclamó durante una conferencia de prensa nacional – el asesinato del General Qassem Soleimani quien estaba de visita en Bagdad para firmar acuerdos de cooperación internacional, lo hizo para reiterar su promesa de “liberar” la región del monstruo iraní. Monstruo que sigue siendo descrito como tal por la prensa internacional la cual rápidamente se reagrupó a los doce días de la agresión israelí.
*La Geometría Fluctúa*
No obstante Estados Unidos está abandonando su posición como perro de presa del mundo debido a que el poderío militara a pesar de lo grande que sea ya no es suficiente, además cuando la influencia política no está presente. Quince años atrás, una batalla como la de los doce días probablemente habría significado una masacre para Irán. Pero Irán ha cambiado y es ahora una potencia mundial y un país clave para la estabilidad de esta. No obstante, lo más que hoy en día Estados Unidos puede hacer es salvaguardar a su aliado de una fallida guerra relámpago a través de una serie de ataques dirigidos.
En todo caso, ciertos modos de pensar parecieran muy duros de erradicar: Donald Trump siguiéndole los pasos a George W. Bush ha planteado demandas extremas a Teherán, exigiendo rendición total. En algún momento esas exigencias fueron exitosas: Yugoslavia fue obligada a ceder Kosovo, Irak fue ocupado y Libia llevada al caos. Pero actualmente, esa estrategia ya no funciona: el cambio de régimen en Irán continúa siendo una meta inalcanzable. El programa balístico de Teherán sigue activo y su programa nuclear sigue adelante.
Washington está enfrentando una situación en la cual pronto se verá obligado a demostrar con hechos que todavía puede imponerse a la fuerza en el plano internacional. De otra manera la creciente ola de desafíos contra el orden unipolar se intensificará y lo empujará hacia una lenta pero inexorable desintegración.
Y ahora, Estados Unidos que durante años se mantuvo como el campeón contra el terrorismo islámico, está entrenando terroristas y poniéndolos a cargo de un país entero y en consecuencia, cumpliendo con el sueño de ISIS de controlar todos aquellos países y explotar su posición para mantener la región en un estado de permanente precariedad, terror y un alto riesgo de conflicto generalizado. Una vez más la geopolítica de los matones amenaza con agredir a todos. Pero, querido matón llamado EE.UU. sus golpes ya no son aterradores: existe todo un mundo que ha aprendido a resistir los golpes y a responder en consecuencia.
La geometría internacional ha cambiado y Washington necesita darse por enterado.
Traducción desde el inglés por Sergio R. Anacona