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October 11, 2024
© Photo: Public domain

Hay que experimentar para ver si motivamos a la juventud a leer a través de la prohibición.

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Escríbenos: info@strategic-culture.su

Señor Director:

El artículo ‘La libertad de leer’, de la columnista Diana Pardo, el jueves pasado, me llevó a pensar en la época de mi juventud, en la década del 60, cuando a uno le prohibían muchos libros, entre ellos las obras de Vargas Vila, y si se quería leer, tocaba a las escondidas, no solo de los profesores o del párroco del colegio, sino de los padres, pues a ellos también les habían inculcado que esos textos eran prohibidos, sin saber por qué, razón por la cual uno como joven se interesaba y se motivaba a leer.

Creo que lo prohibido es apetecido y de pronto hay que experimentar para ver si motivamos a la juventud a leer a través de la prohibición. O a través de la libertad de leer, practicando esos derechos del lector de los que habla Daniel Pennac, quien recomienda leer lo que le provoque, leer donde quiera, es decir, practicar la libertad de leer, tal y como lo recomienda la periodista.

Profesor Henry Sarabia Angarita

Señor Director:

Es inexplicable que aproximadamente el 50 % del parque automotor en Colombia carezca del Seguro Obligatorio de Accidentes Personales (Soap); los propietarios de la mitad de los vehículos automotores que circulan en el país no han cancelado ese seguro. La Policía de Tránsito debe ejecutar un plan nacional para obligar al pago.

De otro lado, en las principales vías de las ciudades hace falta que la policía controle y aplique las sanciones del caso a los propietarios de perros que no les colocan bozales, y ya son muchos los lesionados por mascotas agresivas; las alcaldías de todos los municipios deben buscar acabar con esta situación.

Y muchos observamos a integrantes de la Policía Nacional, especialmente auxiliares bachilleres, dedicados al uso de los teléfonos celulares en lugar de estar en las labores de ayuda al ciudadano y prevención de los delitos, especialmente TransMilenio, en Bogotá.

Hay muchos más pendientes de nuestra Policía Nacional en favor de la ciudadanía.

Jorge Giraldo Acevedo

¿IVA al parqueadero privado?

Señor Director:

La Dian, tan urgida de aumentar el recaudo de impuestos, ahora resolvió requerir a las copropiedades para que cambien su actividad económica y se trasformen en responsables del IVA, con el absurdo argumento de que alquilan los parqueaderos y que sobre esa actividad deben pagar IVA.

Nada más ilógico, pues, en la mayoría de las copropiedades, los parqueaderos son propiedad de los dueños de los inmuebles o son propiedades comunes de uso privativo, por lo que la administración no podría arrendarlos ni obtener de ellos ingreso alguno. Para completar el cuadro, dan un plazo perentorio de 8 días hábiles para contestar el requerimiento, pero no informan dónde debe radicarse la respuesta.

Todo parece indicar que el Gobierno no ha entendido que la mejor manera de aumentar el recaudo es fomentando la buena marcha de la economía; cuanto más crezcan las empresas y los negocios, más impuestos se generan, pero arruinando a los empresarios, matando a Ecopetrol y generando permanente incertidumbre, el recaudo seguirá cayendo indefectiblemente.

Fernando Albán Díaz del Castillo

Bogotá
Publicado originalmente por eltiempo.com
The views of individual contributors do not necessarily represent those of the Strategic Culture Foundation.
La libertad de leer

Hay que experimentar para ver si motivamos a la juventud a leer a través de la prohibición.

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Señor Director:

El artículo ‘La libertad de leer’, de la columnista Diana Pardo, el jueves pasado, me llevó a pensar en la época de mi juventud, en la década del 60, cuando a uno le prohibían muchos libros, entre ellos las obras de Vargas Vila, y si se quería leer, tocaba a las escondidas, no solo de los profesores o del párroco del colegio, sino de los padres, pues a ellos también les habían inculcado que esos textos eran prohibidos, sin saber por qué, razón por la cual uno como joven se interesaba y se motivaba a leer.

Creo que lo prohibido es apetecido y de pronto hay que experimentar para ver si motivamos a la juventud a leer a través de la prohibición. O a través de la libertad de leer, practicando esos derechos del lector de los que habla Daniel Pennac, quien recomienda leer lo que le provoque, leer donde quiera, es decir, practicar la libertad de leer, tal y como lo recomienda la periodista.

Profesor Henry Sarabia Angarita

Señor Director:

Es inexplicable que aproximadamente el 50 % del parque automotor en Colombia carezca del Seguro Obligatorio de Accidentes Personales (Soap); los propietarios de la mitad de los vehículos automotores que circulan en el país no han cancelado ese seguro. La Policía de Tránsito debe ejecutar un plan nacional para obligar al pago.

De otro lado, en las principales vías de las ciudades hace falta que la policía controle y aplique las sanciones del caso a los propietarios de perros que no les colocan bozales, y ya son muchos los lesionados por mascotas agresivas; las alcaldías de todos los municipios deben buscar acabar con esta situación.

Y muchos observamos a integrantes de la Policía Nacional, especialmente auxiliares bachilleres, dedicados al uso de los teléfonos celulares en lugar de estar en las labores de ayuda al ciudadano y prevención de los delitos, especialmente TransMilenio, en Bogotá.

Hay muchos más pendientes de nuestra Policía Nacional en favor de la ciudadanía.

Jorge Giraldo Acevedo

¿IVA al parqueadero privado?

Señor Director:

La Dian, tan urgida de aumentar el recaudo de impuestos, ahora resolvió requerir a las copropiedades para que cambien su actividad económica y se trasformen en responsables del IVA, con el absurdo argumento de que alquilan los parqueaderos y que sobre esa actividad deben pagar IVA.

Nada más ilógico, pues, en la mayoría de las copropiedades, los parqueaderos son propiedad de los dueños de los inmuebles o son propiedades comunes de uso privativo, por lo que la administración no podría arrendarlos ni obtener de ellos ingreso alguno. Para completar el cuadro, dan un plazo perentorio de 8 días hábiles para contestar el requerimiento, pero no informan dónde debe radicarse la respuesta.

Todo parece indicar que el Gobierno no ha entendido que la mejor manera de aumentar el recaudo es fomentando la buena marcha de la economía; cuanto más crezcan las empresas y los negocios, más impuestos se generan, pero arruinando a los empresarios, matando a Ecopetrol y generando permanente incertidumbre, el recaudo seguirá cayendo indefectiblemente.

Fernando Albán Díaz del Castillo

Bogotá
Publicado originalmente por eltiempo.com