El quid de la cuestión es que la Cumbre de los BRICS, que se celebrará en octubre en Kazán bajo la presidencia de Putin, se centrará en la creación de un nuevo sistema de pagos para los países miembros

M. K. BHADRAKUMAR

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Los intelectuales, diplomáticos y políticos iraníes aprecian enormemente el apoyo estelar del primer ministro Narendra Modi a la adhesión de su país a la agrupación BRICS. Modi desempeño un papel clave para impulsar decididamente la adhesión de Irán en la Cumbre de los BRICS celebrada en Johannesburgo el pasado agosto.

El presidente ruso Vladimir Putin no pudo estar presente en Johannesburgo. Pero el Primer Ministro Narendra Modi asistió en persona a la cumbre, desmintiendo los rumores malintencionados y las patrañas en sentido contrario orquestadas por los medios de comunicación occidentales. El plan de juego anglosajón consistía en conseguir de algún modo que la cuestión de la adhesión de Irán se aplazara hasta un futuro indefinido.

El momento decisivo fue una llamada telefónica del difunto presidente iraní Ibrahim Raisi a Modi en la semana anterior a la cumbre. Sin embargo, el terreno para la ráfaga de actividad diplomática de última hora fue preparado en las semanas anteriores por el Consejero de Seguridad Nacional, Ajit Doval, cuando asistió a la reunión de consejeros de seguridad nacional de los BRICS en Johannesburgo a finales de julio, pocas semanas antes de la cumbre, para revisar la cooperación en materia de seguridad y economía.

Doval sostuvo  “reuniones de trabajo” por separado con sus homólogos rusos e iraníes — Nikolai Patrushev y Ali-Akbar Ahmadian, respectivamente. Los Asesores de Seguridad Nacional discutieron la cuestión de la membresía de Irán en los BRICS como un vector central de la cumbre de Johannesburgo.

Los temas de conversación de Ahmadian y Doval abarcaron todo el espectro de las relaciones Irán-India y una ambiciosa agenda para profundizar los lazos en todos los ámbitos, desde el transporte, la energía y la banca hasta la lucha antiterrorista.

Los dos Asesores de Seguridad Nacional coincidieron en que el proyecto del puerto de Chabahar, que es la piedra angular de la ambiciosa visión de Modi para las políticas regionales de la India, se beneficiará de la membresía de Irán en los BRICS, incluso cuando el Corredor de Transporte Internacional Norte-Sur liderado por Moscú esté entrando en funcionamiento de manera constante.

Teherán visualiza que en la corriente descendente del puerto de Chabahar, el comercio y la industria indios pueden y deben entrar a lo grande en el interior a través del comercio, las inversiones y las exportaciones de proyectos. La parte iraní considera que Chabahar tiene potencial para elevar la asociación de India con Irán a un nivel estratégico totalmente superior.

Resulta significativo que la transformación de los lazos entre India e Irán encaje también con el cambio de paradigma que se está produciendo en las respectivas relaciones de ambos países con Rusia. Irán y Rusia firmaron esta semana, en Teherán, un memorando para convertir a Irán en «un centro regional del gas«. El director general de Gazprom, Alexey Miller, asistió personalmente a la ceremonia de la firma, lo que atestigua la gran importancia que el Kremlin concede a este proyecto futurista.

La intención rusa es entrar en el mercado iraní de la región septentrional del Caspio a través de los gasoductos de la era soviética desde el Cáucaso y Asia Central y participar en el desarrollo de la industria iraní del gas, la construcción de gasoductos, proyectos de GNL y proyectos mineros. Gazprom está interesada en organizar suministros de intercambio a terceros países y se están estudiando varios proyectos de GNL en el sur de Irán, según un informe del periódico Kommersant, para explotar el mercado del sur de Asia.

Ahora bien, el panorama general no está completo si no se tiene en cuenta que Moscú y Teherán también están a punto de lograr un avance transformador histórico en su relación, con el tratado de cooperación integral Rusia-Irán , que se lleva negociando desde 2022, listo para su firma en cuanto se asiente el nuevo gobierno de Teherán.

Dejando a un lado el protocolo, Putin mantuvo el miércoles una conversación telefónica con el presidente en funciones de Irán, Mohammad Mokhber, la segunda de este tipo en los últimos quince días. (aquí y aquí)

En cualquier caso, Doval, en su reunión con su homólogo iraní en Johannesburgo, le aseguró que la adhesión de Irán al BRICS ampliaría las capacidades económicas y políticas de la agrupación. Se citó a Doval diciendo que Nueva Delhi utilizaría «todos los medios y oportunidades a su alcance para facilitar la adhesión de Irán» a la agrupación BRICS.

El comunicado indio de la conversación telefónica entre Modi y Raisi, solo cuatro días antes de la cumbre de Johannesburgo, destacó que

Los dos líderes reiteraron su compromiso de fortalecer aún más la cooperación bilateral, incluyendo la realización del pleno potencial del puerto de Chabahar como un centro de conectividad. Los dos líderes también discutieron la cooperación en foros multilaterales, incluyendo la expansión de los BRICS, y esperaban con interés su reunión en los márgenes de la próxima cumbre de los BRICS en Sudáfrica.

Queda por ver hasta qué punto se llevarán adelante estos impulsos positivos en las conversaciones individuales de Modi con Putin durante su próxima visita de dos días a Moscú, el 8 de julio. Rusia e Irán poseen conjuntamente más del 60 por ciento de las reservas mundiales de gas, y en Teherán se espera que el acuerdo energético en ciernes entre ambos países facilite la formación de «un equilibrio energético en la región», en palabras del ministro iraní del Petróleo, Javad Owji. Sin duda, Rusia e Irán pueden ser los proveedores más fiables de gas natural para el mercado indio durante las próximas décadas y reforzar la seguridad energética de India a lo largo de este siglo.

Una visión holística estaría incompleta sin echar un ojo también a la próxima Cumbre de los BRICS. Al fin y al cabo, Rusia e Irán están sometidos a sanciones estadounidenses. El quid de la cuestión es que la Cumbre de los BRICS, que se celebrará en octubre en Kazán bajo la presidencia de Putin, se centrará en la creación de un nuevo sistema de pagos para los países miembros.

Se están estudiando distintas variantes: el uso de stablecoins (fichas de criptomoneda vinculadas a activos como el oro), una plataforma para vincular los sistemas de moneda digital de los bancos centrales y la integración de los sistemas nacionales de mensajería financiera.

En una rueda de prensa celebrada el jueves en Moscú , el Viceministro de Asuntos Exteriores, Sergey Ryabkov, afirmó que los países BRICS están «llevando a cabo iniciativas de forma activa y uniforme» en las 3 áreas mencionadas.

Ryabkov afirmó que el impulso político es «crucial aquí«, y añadió:

Quizá no haya ninguna decisión (en la cumbre de Kazán) que lo revolucione todo por completo, y puede que eso no sea necesario en un área tan sensible en la que el progreso gradual suele ser lo mejor. Sin embargo, habrá resultados tangibles y me complace que todos los Estados miembros, incluidos los que se han adherido recientemente, el 1 de enero, compartan nuestro entendimiento y visión comunes de los pasos necesarios para avanzar.

Modi había entablado una buena relación con Raisi, que debía visitar India a finales de este año. No se puede dejar de subrayar la importancia de retomar el hilo con el sucesor de Raisi. Quizá sea oportuna una pronta visita de Doval a Teherán.

Por cierto, la situación afgana también preocupa a Irán y a Rusia, pues cada vez hay más indicios de una consolidación del Estado Islámico-Jorasán en las regiones del norte de Afganistán, con el apoyo activo de la CIA. En respuesta, Moscú se propone retirar a los talibanes de su lista de organizaciones terroristas y reforzar la cooperación en la lucha antiterrorista con las autoridades de Kabul.

Publicado originalmente por Indian Punchline.
Traducción: Observatorio de trabajadores en lucha